jueves, 17 de junio de 2010

Andalones

Tenés que dejar un rato tu casa.
Yo telefonearé
quizá el inter de un sueño
a la mañana siguiente, medio despierto
a media taza de café
mordiendo la capita azucarada del pan
quizá mientras voy por las tortillas
en short, en chanclas, despeinado, limpio, en tenis

Yo telefonearé
quizá tu estés preparando el desayuno
contestado buenos días al vecino
ajustándote el brassier frente al espejo
comprando en el mercado
o viajando en taxi a tu trabajo

Yo telefonearé
para que vayamos a caminar bastante
por calles empedradas, pavimentadas,
carreteras federales, banquetas,
saltando baches, cruzando puentes peatonales
abriendo veredas urbanas,
haciendo escalas para un helado, un café
andando sin rumbo,
subiendo lomas, piedras gigantes
respetando las señales, transgrediéndolas
metiéndonos en terrenos de nadie,
haciendo dibujos con los pies sobre la arena

Yo telefonearé
ya tú sabrás.

viernes, 4 de junio de 2010

Summary

En esta lucha encarnizada entre los astros y nosotros, ayer casi perdemos.
El remolino de circunstancias gira en contra.
El destino es un dardo cayendo fuera del sitio que formamos.
El montonal de tiempo nos devora sutilmente.
Somos los extremos de una línea que se extiende.
¿A dónde se fue nuestra voz, en qué rincón oscuro germina rosas?
Quisiera ser polvo para pensarte muchas veces, para quererte de todas maneras, al mismo tiempo.